A veces nos sentimos enjaulados y queremos ser libres para vivir nuestra vida.

Nos olvidamos que somos nosotros mismos que nos encarcelamos y nos limitamos a ser quiénes somos porque la libertad no la perdemos; nos la arrebatamos nosotros a nosotros mismos.

Nos tejemos situaciones que nos complican la existencia, pero la simplicidad de quiénes somos y lo que somos, sigue intacta.

No queremos verlo porque creemos que nos complicaremos aún más la existencia haciendo los cambios que nos llevarían a esa libertad. Sin embargo, la realidad es que cuando "saltamos" esas montañas de complicación que vemos delante de nosotros, el valle de las posibilidades es inmenso.

La vida nos empieza a dar regalos que no creíamos posibles y la existencia se vuelve divertida, fluida y llena de momentos que te hacen vibrar contigo mismo y con los demás. Haces lo que sientes, compartes lo que amas, y vives lo que eres.

Con la libertad actuamos según nuestras propias creencias y valores, y terminamos viviendo felices y en armonía con el resto del mundo.

Amamos lo que somos y hacemos, influyendo positivamente sobre los que tenemos a nuestro alrededor, en paz con nuestra existencia y con las acciones que realizamos en nuestro día a día.

Todos somos capaces de ser libres, no dejes que el miedo te bloquee.

No es la realidad, son tus pensamientos que te muestran esa montaña de complicaciones.

Al dar el primer paso, te darás cuenta que solamente era una pequeña piedra en tu camino, y ¡sonreirás y vivirás!

Con Amor